Categorías
Publicaciones

Sin rastro

El TDAH en adultos, puede presentarse escondido en múltiples disfunciones. Olvidos, llegadas tarde, desorganización, perder elementos esenciales,etc. Frente a estas circunstancias, recibimos muchos juicios desalentadores y estigmatizantes : sos un vago, nada te importa, sos cómodo. Nada mas incómodo que vivir con TDAH y no saberlo. El diagnóstico te saca el rótulo, y te permite hacer un tratamiento.

Les comparto un recuerdo de uno de tantos momentos sin registro:

Te levantas temprano, sintiéndote una estrella del time management. Tomás el tren y lees concentrada los 35’ del viaje, otra vez pensás que ya superaste todos los males. Salís del vagón y tomas tu tarjeta Sube (que sabes donde guardaste) volvés a sentirte una mina casi normal… pero llegas al bondi ( ómnibus en lengua argenta) y te das cuenta que perdiste los anteojos que tenias puestos!!!

¿Cuándo ? ¿Cómo?

Esas escenas están missing . Non Verbal Working Memory, tambien inestable… ninguna escena en tu cerebro… ¿Los habré enganchado en mi camisa? Me pregunto.

No recuerdo!

¿Se habrán deslizado por mi nariz y yo no tuve registro?

No recuerdo…

Lo que si recuerdo es que eran los buenos… los necesarios… los “profesionales” … Me siento devastada, porque siento que en cualquier momento puedo perderme yo a mi misma… Digo, soy muy exagerada y sigo fase resolución de problemas.Saco de mi cartera los “dobles” Me digo: cruel y tiranamente: esos de 200$ no los perdés ni que quieras… están rayados… son plásticos.

Imagino otro día adivinando las fechas y los números de afiliados de obras sociales. Me acuerdo también que estoy estresada. Surge algo de autocompasión y me digo: perdiste a tu madre. Estás con demasiadas cosas. Entonces vuelve la imagen de mis 8 años, caminando al borde de la ruta bajo la lluvia. Mi mamá no soportó la perdida de otro paraguas, y me bajó del auto para que volviera a buscarlo. Creo que suponía que el dolor se asociaría a un aprendizaje “modelo”. Nada de esto sucede. Me siento impotente. Me vuelvo a reprochar a mi
misma no poder seguir un sistema. No me sale es cierto. Tal vez deba rediseñarme y operarme los ojos. Eso me daría un tema menos para estar pendiente…

Me vuelvo a escribirles porque necesito liberarme del peso de mi castigo automático cuando pierdo otra cosa que quiero. “No valorás nada” siento las palabras en mi historia… y nada mas errado. Por si alguien cree que no sufro… esto es un ejemplo de mi diario tormento. Gracias y perdón por la catarsis. Seguiré buscando consuelo, es que también lo pierdo.

Compartir:

2 respuestas a «Sin rastro»

«No valoras nada» fue la frase que más me dijeron mis papas en mi infancia y en mi etapa universitaria. Hoy a mis 25 años tengo mi diagnóstico tdah. Saludos desde Rosario!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *